jueves, septiembre 28, 2006

La represión en septiembre (por Fernando)

Al ver las imágenes del 25 de septiembre, cuando los agentes de la Agencia Nacional de Inteligencia, mostraban orgullosos a la prensa los "artefactos" con los cuales supuestamente se estaban preparando para la marcha de los profesores, mostrando botellas vacías con mechas, libros y afiches como prueba de actividad subversiva. Al ver estas imágenes tuve un sentimiento de ´deja vu´, y es porque imágenes casi iguales a estas vi en la prensa en septiembre de 1973, cuando militares cobardes mostraban al mundo lo que los comunistas querían hacer de Chile, y ellos nos salvaron del Apocalipsis. Han transcurrido mas de 33 años y vemos las mismas imágenes. También vemos como miles de chilenos sufren por no tener atención medica y el gobierno a través de su vocero Ricardo Lagos W., con la misma soberbia de su padre, dice que "el gobierno no tiene nada mas que negociar". Hoy tiene que tragarse esas palabras después de las conversaciones de anoche, donde la iglesia católica "fue una instancia de acercamiento", según monseñor Alejandro Goic. Y tiene que tragárselas porque al parecer el gobierno vendrá con otra propuesta. Algo así sucedió con los "Pingüinos", recuerdan? Al parecer en este país para poder lograr algo hay que irse a paro (los que "gozan" de tener trabajo) o hacer desmanes. O encenderse fuego como ayer lo hiciesen dos mujeres en las afuera del Congreso en Valparaíso. Creo que cuando uno llega al extremo que llegaron estas mujeres (estaban pidiendo trabajo) es por que ya nada tienen que perder y al parecer cada vez son mas los chilenos que están en esta situación.... Y septiembre aun no a terminado.

jueves, septiembre 21, 2006

La píldora y los hombres

Mucho se habla de la píldora del día después, pero nadie dice lo que hay que decir: que se trata de PODER. Del poder que ejerce el estado sobre los ciudadanos, del poder que ejerce la iglesia sobre nuestra conciencia, pero sobre todo sobre el poder que ejercen los hombres sobre las mujeres. El poder se ejecuta sobre los cuerpos diría Foucault. Apoderándose del cuerpo de la mujer el hombre eterniza sus privilegios. Mientras las mujeres no puedan decidir sobre sus vientres y su sexualidad seguirán sometidas al hombre, quien dirigirá sus vidas condenándolas al ámbito privado, a lo domestico, a la familia, alejándolas de lo publico, del trabajo en sociedad y de la política. La emancipación femenina pasa por el derecho de la mujer a decidir sobre su propio cuerpo, bienvenida sea la píldora.