jueves, octubre 26, 2006

No a la cultura del robo

Pinochet debe ser el mandatario que más le ha robado a Chile y a los chilenos. Quienes lo conocieron antes del golpe lo han descrito como un personaje austero y simplón. Quizá por eso muchos le creyeron cuando declaró que así como llegaba se iría. Claro que sí, porque detrás de su traición al gobierno de Allende, había una razón ideológica, quizá odio, pero no un interés económico. Sólo nos podemos imaginar que en algún momento pensó: “¿por qué no? si tengo el poder absoluto”, y muchos de los que se podían ver beneficiados lo incentivaron y aplaudieron. Hoy podríamos decir que se trata de algo propio de un régimen autoritario y que podemos confiar en la democracia como garante de transparencia, pero desgraciadamente eso no ha quedado claro hasta ahora.

martes, octubre 10, 2006

Participar sin incomodar

Cuando Bachelet convocó a crear un gobierno participativo se equivocó si pensó que una invitación de ese tipo conllevaba el apoyo incondicional de las masas a su futura gestión. Porque los chilenos lo entendieron de otra manera: por fin alguien nos escuchará, pensaron. Claro, los políticos desearían que la gente los eligiera para seguir sus directivas como si fueran mesías, pero la verdad es que la gente los vota con la esperanza de que hagan caso a las inquietudes ciudadanas, que es todo lo contrario. Así se explica que el gobierno concertacionista que pretendía ser el más cercano a la gente sea hoy el que más problemas ha tenido justamente con la gente. No es difícil entender que las tomas y huelgas del último tiempo, se hubieran podido evitar o por lo menos desdramatizar con una gestión más dialogante y menos arrogante por parte de los ministerios correspondientes. Pero seguramente los ideólogos del gobierno piensan que es la gente la que no entiende esto de la participación...